Las inspecciones termográficas en los edificios se realizan de forma no invasiva y nos proporcionan un diagnóstico real en la identificación de problemas que se pueden corregir de forma anticipada evitando que se agraven.

Con la termografía conseguimos hacer visible lo invisible, por eso es muy recomendable en la localización de los defectos constructivos.

Techos con puentes térmicos

 

Ventanas mal selladas

 

Humedades

 

 Infiltraciones de aire

Falta de aislamiento

Roturas, fugas y atascos

 

 

 

Si quieres conocer todos los problemas ocultos que tiene tu vivienda, mejorar el confort, la salud y el ahorro energético. Contacta con nosotros y te facilitaremos presupuesto sin compromiso.

 

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